Hay que ver qué vidas más entretenidas tienen los aristócratas (imagino que los que se lo saben montar o tienen una inteligencia sensible o al menos dos dedos de frente), qué de desmesuras imposibles para el común de la especie y qué miedos, dramas y dolores tan ajenos a casi cualquier lector atrapado en la … Sigue leyendo Iniciándome en Nothomb.
